Una pisada de bruja en mi puerta. Apoyándome en mi vara y sujetando una vela en mi mano derecha, sigilosa, trazo el Compás de las brujas. Algunos lo llaman trazar el círculo. Yo lo llamo el Compás. Los puntos cardinales de la magia. La llamada a los guardiantes del norte, del sur, del este y del oeste.
La llama de mi vela se agita en la noche. Mis pasos cierran el compás y dentro se genera el mundo que está más allá del mundo conocido y visible.
Dicen que los brujos del cerco no trazamos el círculo. Yo sí lo trazo. Lo trazo porque hacerlo me hace bruja. Porque cuando marco con mis pisadas territorio tan sagrado me doy cuenta de la importancia de esos pasos y de los muchos que antes los dieron. No me aislo del ambiente. No. No es eso. He escuchado decir que los brujos del cerco se han deshecho de toda ceremonia y sobre la sencillez de sus rituales. Que no trazan el círculo porque no ven sentido a aislarse de la naturaleza. Pero los brujos somos brujos porque trazamos el círculo y decimos palabras sagradas a los puntos cardinales invocando a los númenes y a los seres que habitan el bosque en secreto, esos que tanto miedo dan a los que no son brujos.
El círculo es un espacio que me conecta con otro espacio aún más grande, el espacio invisible donde toda Magia se hace. Es para mi, el Círculo o Compás una Puerta, una puerta hacia otra dimensión en la que los búhos me visitan, en el que se escuchan las pisadas de Herne en el bosque de Windsor, en el que la serpiente sagrada sube hacia mi frente desde lo más profundo de las colinas donde habitan las sídhe, donde las Madres trazan el destino en las antiguas noches de Yule, donde puedes ver la Cacería Salvaje tronar en el cielo en el punto álgido del Desgobierno y donde el Viejo Cabrío y la Dama me entregan una antorcha que llevaré fuera del Compás...
Muchas veces, solo enciendo una vela blanca porque llego cansada y no puedo más que trazar el compás. Suficiente. Cierro los ojos allí dentro y les pido consejo... Y escucho, y veo, y siento... y no hago nada más. Y el Astado regresa a la oscuridad y la Dama, en este tiempo, despierta y sale de las colinas y despierta muchas cosas en mí.
Interesante todo el post, pero no entendí como se hace el cerco. En el suelo?, en una mesa? és un tablero?, es imaginario?
ResponderEliminarQué bonito Marta, aunque estés cansada tienes tu momento para ello, ojalá llegue yo a ese estado... siento curiosidad por saber cómo trazas el compás... hay alguna tradición en la Brujería del Cerco para hacerlo?
ResponderEliminarSE PUEDE TRAZAR CON LA VARA O MENTALMENTE INCLUSO.LO TRAZAS DONDE VAYAS A REALIZAR TU RITUAL, ES IMPORTANTE QUE ESTÈS TRANQUILO, EN SILENCIO Y QUE NADIE TE MOLESTE.
ResponderEliminarDespués de leer varias veces esta entrada hay algo que no consigo entender, parece mucho más sencillo y de hecho creo que lo es.
ResponderEliminar¿Porqué las brujas y brujos del Cerco en principio no trazan el círculo mágico o compás si, supuestamente el Cerco está para que sea cabalgado y se acceda al Otro Mundo? ¿Dónde queda entonces la práctica como pilar fundamental si se han desecho de toda ceremonia o ritual?
En mi opinión desprenderse de todo ritual tajantemente no es más que una reacción exagerada de una experiencia desagradable.
Como bien dices, si no se pronunciasen palabras sagradas a los seres de los bosques, provenientes de un antiguo legado ¿dónde quedaría la magia?
Un saludo
Estimado Gonzalo,
ResponderEliminarSi lees bien el post, verás que hay una corriente de personas que practican Brujería del Cerco que no trazan el Círculo. Precisamente yo defiendo que trazar el Compás o Círculo mágico es lo que nos convierte en brujos. No sé porqué esa gente no lo hace pero creo que cada cual ha de hacerlo como mejor le resulte.
Ahora, en Brujería del cerco no practicamos la magia ceremonial porque ésta no es brujería, y menos brujería tradicional. Si lees la historia de la wicca así como las biografías de sus principales "fundadores" te darás cuenta y sabrás de dónde vienen exactamente las prácticas wiccanas y mucho del neopaganismo actual. No se trata de haber tenido una experiencia desagradable, no creo que nadie que practique brujería correctamente la haya tenido, es simplemente que hay dos corrientes muy claras hoy en día: el neopaganismo y su ceremonial y la tradición brujil más antigua donde el ritual queda reducido a su mínima expresión. Ojo, eso no significa que no pronunciemos fórmulas mágicas. No hacer rituales no significa que invoquemos y trabajemos a través de la palabra. Espero haberme explicado.
Un saludo y gracias por comentar.
Gracias por la explicación, ahora entiendo los matices. Siendo novato lo confundí.
EliminarUn saludo
¡Hola Marta!
ResponderEliminarTengo una pregunta que me lleva confundiendo desde que estoy en el Arte.
Cuando haces un ritual trazas el Círculo o Compás, cuando has terminado pero la vela con la que trabajas sigue encendida, ¿qué debes hacer? Salir del compás y esperar a que se consuma la vela con el compás aún formado o deshacer el compás y dejar que se consuma la vela hasta el final. No se si me he explicado bien...
Gracias, un abrazo.
Pedro.